En una maratónica jornada de alrededor de trece horas, el Senado logró esta semana dar un paso clave en la tramitación del proyecto de despenalización del aborto al aprobar por separado cada una de las tres causales.
- Riesgo vital de la mujer
- Inviabilidad fetal
- Violación.
De esta forma y no exento de polémicas, -entre ellas, la presencia en la sala de la vocera del bus de la libertad, Marcela Aranda, en calidad de invitada por la senadora Ena Von Baer-, los parlamentarios acogieron el emblemático plan del segundo gobierno de Michelle Bachelet. Eso sí, algunos senadores de Chile Vamos, como Hernán Larraín, indicaron que llevarán el proyecto ante el Tribunal Constitucional.
Tras esto, el proyecto pasó ahora a la Cámara de Diputados, donde se debatieron los puntos en que no hubo acuerdo con el Senado. Si no había diferencias, el proyecto que ha sido tramitado durante dos años y medio, quedaría listo para convertirse en ley.
Pero, ese no fue el caso. Por un voto, la Cámara baja rechazó los cambios realizados en el Senado al artículo que definía las competencias de los tribunales de justicia en el caso de menores de 14 años. El artículo requería de 67 votos a favor para ser aprobado. Finalmente obtuvo 66 a favor, 40 en contra y 1 abstención del diputado DC, Marcelo Chávez.
Lo que viene
Ahora el proyecto pasará a la Comisión Mixta, que es un grupo integrado por cinco senadores y cinco diputados, que todavía no son los que revisarán las divergencias que aparecieron en las discusiones en cámara durante la tramitación de la ley.
Y si, como es probable, Chile Vamos solicita que sea revisado por el Tribunal Constitucional, el panorama no es muy favorecedor. Actualmente la entidad es presidida por Carlos Carmona -más cercano al oficialismo, quien estará hasta el 30 de agosto en ese cargo, siendo sucedido por Iván Aróstica, Este último estaría en contra de las causales del proyecto y si hay un empate en al votación del TC, él deberá dirimirlo con su voto.