La piña, además de fresca y sabrosa, posee propiedades que ayudan a que el organismo funcione mejor. De hecho, tanto el sistema digestivo, como respiratorio y cardiovascular obtienen beneficios con tan solo dos rodajas al día.
Y es que la dosis diaria que recomiendan los expertos se estima en 12 trozos o dos rodajas, logrando con esto prevenir enfermedades y beneficiarse de sus propiedades.
- Reduce la inflamación: La piña contiene bromelina, que es una sustancia que desinflama intestino, colon y, por lo tanto, te ayuda a lucir un vientre plano. Además, reduce el dolor, la hinchazón y la cicatrización de heridas.
- Mejora la digestión: El jugo de la piña y su fibra agilizan el proceso digestivo, con lo que ayudas a evitar la inflamación estomacal y el estreñimiento. Toma en cuenta que la acidez de la piña aumenta el jugo gástrico. Por lo tanto, si tienes gastritis o úlcera diagnosticada, debes moderar el consumo.
- Tu corazón se fortalece: El alto concentrado de vitamina C de la piña protege al organismo de problemas cardiovasculares y aumenta la producción de colágeno.
- Te mantiene joven: El manganeso que contiene esta fruta protege las células del cuerpo de la oxidación, a la vez que la piel, el cabello y las uñas se mantienen más saludables y en general te conservas más joven.
- Mejora la vista y sistema óseo: La vitamina A, la betoquerotena, el calcio y el magnesio abundan en la piña, lo cual no sólo es bueno para proteger la vista, sino también para fortalecer tus huesos.