Nadie dijo que ser papás era algo fácil y mucho menos al momento en que empiezan a crecer. Ya que es aquí, donde empiezan a desarrollar sus personalidades y también comienzan a mostrar su carácter.
Y a medida que crecen, los niños empiezan a decir mentiras. Pero mucha atención, porque en un inicio, esto no es algo negativo, sino que más bien un signo de progreso cognitivo.
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Es que todos los niños, en una etapa de su crecimiento son más propensos a decir mentiras, y según los especialistas, el comenzar a mentir es un hito en el aprendizaje de ellos, al igual que lo es hablar o caminar.
De hecho, los niños que mienten desde pequeños, tienen mayores capacidades en su cerebro y mientras más pequeños lo hagan, más desarrolladas tienen sus habilidades.
¿Por qué decir mentiras es algo bueno para su desarrollo?
Al momento en que un niño dice una mentira, se desarrolla un gran proceso en su cerebro. En primer lugar, el pequeño tiene que entender lo que está pasando en la mente de la otra persona. Y también analizar qué es lo que sabe y qué no. Por lo mismo, en esta situación el niño es consciente de que tiene más información que la otra persona y por lo mismo puede mentir.
Además, durante este proceso, el pequeño es capaz de inhibir el impulso de decir la verdad y convertirla en mentira. De todas formas, siempre hay que estar atentos a lo que dicen y hacen tus niños y dejarles en claro que las mentiras no son buenas.