Hoy sábado es el estreno de nueva temporada del popular programa de viajes de Canal 13 Lugares que hablan.
Es por esto, que el pasado jueves, el animador del espacio Pancho Saavedra reveló detalles, en el programa Sigamos de largo.
Asimismo, contó una experiencia extrema y aterradora que les tocó vivir que durante la grabación en el Estrecho de Magallanes cuando, por culpa del oleaje, perdieron el control de la lancha en la que viajaban.
La historia surgió luego de que el «El Catador», conocido camarógrafo que lo acompaña, lo incitara a contar la experiencia.
Lee: Leo Méndez Jr. habló sobre su identidad de género en «Sigamos de Largo»
Al borde de la muerte
“Estábamos de regreso, nos habían dicho: ‘Chiquillos, pienso que se van a tener que quedar acá, porque el estrecho está bravo’ (…) De repente vamos en esta lancha de Conaf, en la mitad, íbamos casi llegando, y empezó un oleaje tan grande que esto se empieza como a dar vuelta“, contó Francisco.
Luego, contó que al hombre que manejaba la lancha, se le salió el timón. “Él le dice a su amigo: ‘¡Ayúdame, ayúdame’!”, recordó sobre aquel desesperante momento.
Al ver que las cosas se tornaban complicadas, Francisco apretó el botón de pánico de su teléfono satelital, el cual mantiene por casos de emergencia.
“Yo dije: ‘Hasta aquí nomás llegamos’”, confesó.
Cabe mencionar que, reconoció que por un instante pensó en saltar de la lancha, ante el miedo de que se diera vuelta.
Pero su equipo logró mantenerlo adentro de la embarcación, por su seguridad.
“Apreté el botón de pánico, y empecé: ‘Padre nuestro que estás en el cielo…’ (…) Yo me estaba despidiendo. Incluso dije que iba a saltar (…) Yo gritaba: ‘¡No me quiero morir acá!’“, confesó el animador de Lugares que hablan.
Pancho Saavedra aseguró que lograron salir de la difícil situación, luego de qué afortunadamente el hombre logró colocar el timón, y volver a dirigir la lancha.
“Nos devolvimos a la isla, yo me siento y me puse a llorar”, reconoció Saavedra.
Finalmente, tras un llamado de Pancho a un General de la Armada, un buque los fue a rescatar. “Yo lo único qué hacía era rezar”, expresó.
Puedes ver el relato completo aquí.