Después de las fiestas de fin de año, varios comienzan a eliminar los excesos de comida para así ponerse las pilas y lograr bajar esos kilitos de más.
¿Te ha pasado que comes mientras trabajas y luego, con el paso de las horas, vuelves a comer otra cosita? Este desorden en tu horario es un detalle que deberías prestar atención cuando buscas perder peso de forma inteligente y sobre todo, debes fijarte en la hora en que almuerzas.
Según una investigación publicada en el American Journal of Clinical Nutrition, la gente que come después de las 3 de la tarde es la que menos peso pierde. Esto se debe a que en el estudio encontraron una variación genética específica de la proteína perilipina —esencial para la quema de grasas—, que determinó que las personas que almorzaban tarde perdían menos peso.
Aunque este análisis estaba enfocado en personas con un perfil genético específico, existe otro estudio publicado en el International Journal of Obesity que reveló que comer tarde está asociado a un menor éxito en la pérdida de peso.
Pero, ¿por qué la hora afecta a tu cuerpo? Principalmente porque el ritmo circadiano controla el hambre que tienes, al mismo tiempo que lo hace con el sueño. «El metabolismo es distinto en cada individuo y la hora en la que consumes tu comida en relación con tu ritmo circadiano puede influir en la pérdida de peso», explicó la doctora Marie-Pierre St-Onge, investigadora y profesora en la Universidad de Columbia.
Por lo tanto, si comes a una hora en la que el cuerpo es menos sensible a la insulina, puede que te sea más complicado perder peso. Eso sí, en la investigación no encontraron ninguna diferencia en la pérdida de peso cuando analizaron los horarios del desayuno y la cena. ¡Sólo en el almuerzo!