Miles de personas se instalaron hace días en las afueras del Palacio de Bellas Artes en Ciudad de México, esperando la llegada de los restos del Divo de Juárez.
Después de tres horas, la urna llegó en una carroza, entre medio de los miles de fans que iban entre lágrimas y con flores a despedirlo. En medio de la despedida se desató la lluvia, por lo que muchos medios decían que incluso el cielo lloraba la partida de Juan Gabriel.
«Simplemente doy las gracias por haber sido su hijo. Él dio su vida por la música, pero siempre tomó el tiempo para apoyarnos y estar con nosotros. Si necesitábamos algo, él nunca faltó. Éramos muy unidos toda la familia. Todos estamos trabajando pero tomamos el tiempo para vernos», afirmó Iván Aguilera, uno de los hijos del cantante.
Fue él mismo quien presentó la urna con las cenizas del Divo De Juárez en el homenaje que se le rindió ayer en la tarde en el Palacio de Bellas Artes.