Los primeros meses en la vida de un bebé son rapidísimos y antes de darte cuenta, deja de ser un pequeño ser humano y comienza a lograr sus primeros obstáculos. Uno de ellos es el gateo.
La acción de gatear es muy importante en el desarrollo de nuestros hijos. A partir de los seis meses el consejo hacia los padres es bastante claro: que ya no le pongan gimnasios de juguete (esos que tienen peluches móviles que cuelgan y algunas cosas a su alrededor, en el suelo). ¿La razón? Así estimulan que él mismo se gire y trate de llegar a lo que le interese.
Esto se dice precisamente para que el bebé empiece a conocer el suelo y empiece a reptar y luego gatear. El promover que un bebé tenga la oportunidad de gatear es positivo porque el gateo es una etapa normal en el desarrollo que sirve para prepararse para etapas posteriores.
Algunos de los beneficios de gatear son:
- Al gatear, tu hijo se conecta con los hemisferios cerebrales porque crea sus propias rutas de información. Esto se relaciona con las funciones cognitivas.
- Con el gateo, tonifica los músculos de las caderas y los hombros. De esta manera, lo ayudará a mantener la columna recta para cuando empiece a caminar.
- Ayuda con la vista. Como debe enfocar a corta distancia para gatear, le ayuda a ejercitar el músculo de los ojos.
- Ayuda a escribir. Sí, tal como suena. Con el gateo, el hijo aprende a coordinar la distancia ojo-mano, lo cual le sirve a la hora de leer y escribir porque tiene una distancia similar.
BONUS TRACK:
Y para llenar de ternura tu tarde, te dejamos con este video de un perrito que le enseña a gatear a una guagua <3