Ingerir comida siempre fresca y no consumir alimentos procesados son algunas de las reglas esenciales que mantienen a Jlo en buen estado físico, que a sus 46 años y con 2 hijos la hacen tener uno de los cuerpos más envidiados del mundo. Su piel canela y sus curvas, la han llevado a tener miles de portadas y comentarios que solo hablan de eso.
La cantante de origen puertorriqueño subió 23 kilos durante el embarazo de sus gemelos y hoy deslumbra con una silueta mucho más firme y moldeada, gracias a una dieta y a una estricta rutina de ejercicios.
Tener esas curvas que todas quisiéramos no son un milagro, ya que el trabajo que hay detrás de ellas es duro. Desde el 2008 que Jennifer López entrena al lado de Tracy Anderson y fue ella quién le reveló a la revista People algunas de las claves para lograr tener ese escultural cuerpo.
En cuanto a sus comidas solo se trata de cosas sanas y orgánicas, basadas completamente en proteínas y en altos porcentajes de nutrientes. : “La hago comer muy sano porque necesita buen combustible para todo lo que está haciendo”, dijo su entrenadora.
El desayuno de la intérprete de ‘On the Floor’ consiste en plátanos, arándanos y leche de almendras. Posteriormente en el almuerzo come ensaladas y para cenar prefiere pasta zucchini con queso vegano y tomates. Además, el azúcar ya no existe en la vida de Jlo y evita la sal. Por otro lado, la cafeína la eliminó por completo y claro, prohibido el alcohol y los cigarros.
Su rutina diaria de entrenamiento consta de largas horas de cardio, combinando 13 ejercicios distintos y que cambian cada 10 días, entre ellos bailes y aeróbicos. Uno de sus panoramas favoritos es el boxeo.