El 12 de febrero pasado, la modelo María Laura Donoso quedó sin hogar debido a un incendio que consumió su viviendo en la comuna de Las Condes.
El siniestro que afectó a los dos pisos del inmueble, terminó con todo consumido. “Se perdió todo. No me quedó nada, la casa es de cemento pero está toda quemada (…) las llamas salían por todos lados”, fue lo que dijo la modelo en ese tiempo.
Ahora, después de 23 días del trágico incidente, María Laura se encuentra viviendo un difícil momento. En contacto con el programa farandulero «Intrusos», la modelo y empresaria contó que arrendó un departamento con su esposo, mientras que sus hijos se están quedando en casas de amigo y familiares.
Donoso confesó que ella se lleva el mayor peso del problema, ya que debe rearmar el hogar que perdieron.» Estoy sola, nadie me ayuda. Mi familia está pero cada uno por su lado. Uno estudiando, los demás trabajando y después estoy yo“, señaló.
“Te quedas como cuando muere un ser querido, hay un luto. Murieron tus cosas. Hay cenizas de lo que fue tu historia, tu casa“, dijo al programa, agregando que: “Estar ahí en la casa con todo los escombros, cuesta mucho. Las pocas cosas que te quedan, tú lo ves como agredidas, dañadas».
Si bien hay un dolor emocional por la pérdida, María Luisa contó que el impacto económico es bastante grande. “El (crédito) hipotecario, que es el que tengo yo, te paga lo mínimo, las puertas, las ventanas y el techo. Y ahora tú empiezas a tratar de hacer que la rueda avance y cómo lo haces, limpiando la casa, sacando los escombros”, explicó.
La modelo igualmente hizo un desesperado llamado a las personas, ya que la ayuda más urgente que necesita es encontrar un lugar donde pueda guardar algunas de las cosas que logró salvar de la casa. “La única ayuda que yo pido es que si alguien tiene containers, que son de embalaje (que me lo preste). No voy a ocupar ni siquiera uno, la mitad de uno quizás”, expresó.
Igualmente, María Luisa dice sentirse conmovida por el cariño que ha recibido de la gente. “Lo que me quiebra son los cariños, los abrazos, los besitos, los mensajes de fuerza. Todo eso”, concluyó.
