Para Kel Calderón esta cuarentena ha sido intensa y ha decidido no quedarse de brazos cruzados. Si bien la influencer se resguarda en casa, también ideó un proyecto para ayudar a los damnificados del coronavirus. Es más, la egresada de Derecho se toma tan en serio lo que está pasando con la pandemia, que decidió funar a su mamá Raquel Argandoña por no respetar la cuarentena.
En entrevista con Angélica Castro en su programa «Velvet al desayuno», transmitido por el Instagram Live de Revista Velvet, Kel explicó por qué hizo esto. “Los papás se ponen súper porfiados. A mí no me hizo caso cuando le escribí en su teléfono, le dije ‘no tienes 20 años’ y no me pescó… lo puse en mis stories y todos comenzaron a escribir ‘ándate para la casa’. Ella me dijo ‘no puedo creer que mi propia hija me esté funando’”, comentó.
Además Kel aseguró que con la cuarentena los roles de sus padres se han invertido. «La cuarentena ha hecho cosas muy raras con mis papás. Mi mamá está más joven que yo, anda con la bota larga, producida, se maquilla todos los días porque se va a juntar con Félix (su pareja), está más joven que yo. Y mi papá que siempre ha sido un trabajólico, rayado de trabajólico, siempre anda apurado y la cuarentena lo tiene de barba, tiene rutinas de ejercicio porque no quiere ponerse viejo, está más relajado”, agregó.
Además la influencer reflexionó sobre la maternidad y su futuro profesional, asegurando que no descarta convertirse en madre algún día. “Yo soy muy trabajólica, pagamos un precio muy alto al formar familia, es inevitable que te corte tus expectativas laborales. No sé si me case o no, sí me gustaría armar una casa, participar en su educación, crear buenas personas, sería entretenido…si se da bien, o si no, invento otra cosa”, afirmó.
Kel Calderón y su proyecto «Redes en caja»
Por estos días Kel también ha hecho noticia por su labor social, la cual se ve reflejada en la iniciativa «Redes en caja», que consiste en entregar cajas de comida a familias vulnerables.
Respecto a cómo nació la idea, cuenta que fue junto a su mejor amiga de la universidad, tras ver las duras imágenes de la crisis más allá del coronavirus. Entonces comenzaron a moverse entre sus cercanos y ya han entregado más de 500 cajas.
“Yo amo las redes sociales, llegamos a tanta gente, hay una responsabilidad que uno tiene que tener, no sabes qué niñita puede estar al otro lado, que te mira como ejemplo, que te toma como referente. Eres un medio de comunicación, inevitablemente. Amo hacer contenido entretenido, pero hay momentos que uno tiene que estar a la misma altura, también uno tiene que ayudar en algo”, sentenció Kel.