La actriz Jennifer Aniston estuvo en Nueva York, Estados Unidos, para estrenar su nueva película «Office Christmas Party».
Durante la avant premiere, la mujer de 47 años pasó una gran vergüenza con su vestuario, ya que olvidó sacarle la etiqueta a su vestido y todos los paparazzi lo notaron. Aniston llevaba un vestido negro de la última colección otoño- invierno de la marca francesa Céline.
Rápidamente las fotografías se volvieron viral en Internet y todos comentaban el descuido de la ex protagonistas de «Friends».