Hace un mes, todos nos conmovimos con la partida del pequeño León Smith. El pequeño estaba conectado a un corazón artificial, esperando a un donante, para el trasplante que nunca pudo hacerse. Lee más acá.
Su partida desató reacciones sobre la importancia de donar órganos, conversarlo con nuestra familia, y sensibilizarse con el tema, tan importante y donde como país estamos tan en deuda. Recordemos que además, la familia fue consecuente y donó sus riñones. Revisa acá los detalles
Y hoy, a un mes del fallecimiento de León Smith, su familia da a conocer una información que nos golpea: después de estar cuatro meses hospitalizado en la Universidad Católica, los padres deben lidiar con una gran preocupación: la deuda de más de $554 millones que tienen con el recinto, de las que $300 millones son sólo por los corazones artificiales importados que mantuvieron con vida por meses al niño.
La cuenta que incluye todas las prestaciones que recibió el menor llegó a manos de la familia hace sólo un par de días y está siendo revisada por sus abogados.
El abogado de los padres de León, Esteban Barra, no están en condiciones de afrontar esa deuda por lo que están buscando una salida. «Estamos buscando que esto se financie como la ley dice que se tiene que financiar. Aplicándose todas las coberturas de los planes de salud que corresponden que las isapres cubran y en todo aquello que les corresponda pagar a los afiliados, que se financie con cargo a lo establecido a la Ley de Urgencia».
Para Barra esto es factible ya que se cumplen con los requisitos para considerar el caso de León como de Ley Urgencia, debido a que el menor ingresó al recinto hospitalario en condición de urgencia, que significa que haya tenido riesgo vital o riesgo de secuela grave y que nunca pudo estabilizarse medicamente, momento en que este beneficio expira. «León nunca estuvo estabilizado, entonces la ley procede. La clínica ya lo aceptó», dijo.
«Ahora corresponde que la isapre aplique la cobertura y que la diferencia lo pague con cargo a la Ley de Urgencia. La isapre tiene que pagar a la clínica y ese pago se entiende que es un crédito al afiliado, el que tiene que pagar en cuotas mensuales», precisó.