Este lunes en la noche se emitió un nuevo capítulo de «Sigamos de largo», el programa de trasnoche de Canal 13. En esta ocasión, Francisca García-Huidobro y Maly Jorquiera estuvieron conversando con los actores Álvaro Morales y Julio Milostich, quienes contaron sobre sus nuevos emprendimientos culinarios durante la pandemia, además de sus diferentes anécdotas actorales e historias personales.
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En ese contexto, el actor Julio Milostich tuvo una sincera conversación al revelar una situación que vivió con su hija mayor Isidora, con quien se reencontró luego de 12 años sin verse.
La confesión de Milostich
El intérprete confesó que la abandonó cuando tenía apenas cinco años de edad. “Estoy tratando de arreglarlo, poco a poco, porque es difícil, porque ya no estuve, ya la cagué”, sinceró.
El actor tras el recordado personaje de José Luis Echeñique en «El señor de la querencia» reveló que la contactó a través de Facebook para enmendar aquel abandono, el que definió como el mayor error de su vida.
“Uno comete la estupidez de repente de porque te desencuentras con los adultos, yo cometí el error de hacerme a un lado y abandoné a mi hija. La abandoné en el sentido de que no debiera haber hecho caso a lo que estaba pasando y haber insistido, que el mundo se caiga, da lo mismo”, comentó Milostich. Así, dio a entender que tuvo problemas con la madre de la niña, tomando esta equivocada decisión de la que hoy se arrepiente.
Tras 12 años de ausencia, Milostich pidió ayuda para ingresar a Facebook y ubicar a su hija, quien ya era una adolescente.
Lo más sorprendente de la historia es que, al día siguiente de buscarla por la red social, la vio en la calle. Esto ocurrió cuando por casualidad él pasaba por afuera del cine Normandie de Santiago junto a su otro hijo, Mateo. Ambos se vieron y se reconocieron, reveló en la conversación.
“Nos contactamos, conversamos y hasta el día de hoy estamos tratando de resolver todo el tiempo perdido. Cada día una gotita”, sinceró el actor. Además, contó que por la pandemia del coronavirus han estado separados “pero estamos en eso. Un besito a la Isidora y también a mi hijo Mateo, que los amo con toda mi alma».
Por su parte, tras escuchar su emotivo relato, García-Huidobro le dedicó una sentida reflexión. “Ánimo, vamos que se puede. El tiempo no se recupera, pero se gana otro tiempo”, dijo.
