Si viste las últimas temporadas de «Rojo, el color del talento», de seguro recuerdas a Hernán Arcil. El joven bailarín participó en dos temporadas, en la primera fue el ganador, llevándose un departamento como premio y en la segunda quedó en cuarto lugar.
Sin embargo, con la llegada del Covid-19 y la pandemia, el joven tomó la decisión de dar una vuelta a su vida y comenzar con nuevos proyectos.
Entre ellos, tomó la decisión de irse a vivir a sur de nuestro país, específicamente a Temuco, donde vive su familia. Por lo mismo, tomó la decisión de vender el departamento que actualmente tiene en Santiago y que fue el premio que ganó por su participación en el programa «Rojo».
«Constantemente me he preocupado de bailar y estar siempre ‘al pie el cañón’ y buscar objetivos con respecto a eso, pero hace un año me empecé a enfocar en mi bienestar emocional», contó Hernán Arcil a Página 7.
Hay que recordar que actualmente el bailarín se encuentra realizando clases de Danza a través de zoom. Y es que él mismo reconoce que la pandemia y la cuarentena le han servido para enfocarse más en él. «Me ha dado la oportunidad de conocerme, de buscar la mejor versión de mí y me ha dado espacio para preocuparme de otras cosas que había dejado de lado», agregó.
Hernán Arcil y la decisión de vender su departamento
Es que al bailarín le ha acomodado bastante su vida en Temuco y por lo mismo, está pensando seriamente en quedarse viviendo ahí por un tiempo indefinido.
«Me encantaría, porque el sur es un lugar hermoso, su gente es preciosa y me he acostumbrado mucho en los últimos meses a la tranquilidad que tiene», contó.
Además, reveló que ya puso a la venta el departamento que ganó en «Rojo». «Lo estoy vendiendo y estoy esperando que todo eso resulte y ver cómo nos va», dijo Hernán Arcil. Agregando que cuando lo venda, va a poder hacer su siguiente paso. Que es un proyecto que tiene en mente, pero que por ahora no puede contar más detalles.
Sobre volver a la televisión, el bailarín contó que no lo ha llamado, pero que tampoco se cierra a esta posibilidad. «La vida me ha enseñado que hay que dejar la puerta abierta para cualquier tipo de oportunidad y cualquier trabajo va a ser bien aceptado», finalizó Hernán Arcil.