Conocidos son los problemas que trae fumar durante el periodo de gestación, tanto para la madre como para un bebé.
Entre las complicaciones que se pueden presentar están nacer prematuro, bajo de peso y con enfermedades respiratorias. En esta misma línea, un estudio de la Universidad de Kioto estableció que los menores de madres que fumaban en el embarazo, tienen más probabilidades de padecer enfermedades renales.
En la investigación, se evaluaron los historiales clínicos de 44595 niños a los que se había realizado un seguimiento exhaustivo desde el momento de su nacimiento hasta los tres años, dónde con pruebas de orina se midieron los niveles de proteinuria, proteína que en exceso es signo de disfunción renal.
Tras los exámenes, los científicos establecieron que se aumenta un 24% el riesgo de padecer enfermedades en el riñón, cuando la madre continúa fumando estando embarazada.
Koji Kawakami, uno de los encargados del estudio, informó a ABC que es importante abandonar este hábito al menos durante el periodo de desarrollo del feto, si esto no se realiza, puede llevar a una enfermedad renal crónica en edad adulta, incluso necesitar un trasplante de este órgano.