Llevar una alimentación saludable y actividad física constante son claves a la hora de perder peso y evitar, con el paso de los años, caer en el sedentarismo.
Sin embargo, existen varios mitos entorno al tema por lo que un estudio español analizó las principales dudas que surgen entre las personas que quieren empezar un camino hacia la actividad física.
1. Para perder peso lo mejor que puedo hacer es empezar a correr
Falso. Una persona con sobrepeso u obesidad no puede cargar en exceso las articulaciones. Por lo mismo, lo más recomendable es comenzar con ejercicios de menor impacto como nadar o hacer bicicleta. Más adelante puedes hacer carreras o ejercicios de alto impacto.
2. Sudar hace perder calorías
Falso. El hecho de sudar no tiene ningún efecto para eliminar calorías. Lo que botas es agua y líquidos de tu cuerpo, pero eso no se traduce en calorías. Por lo tanto, no es bueno que te vistas con exceso de ropa ni que abuses del sauna pensando que así bajarás esos kilitos de más.
3. El deporte es bueno
Depende. Siempre está condicionado a la situación personal o estado de salud. Algunas prácticas recomendables son caminar a una intensidad suficiente, hacer una actividad física en compañía de otras personas, hidratarse, seguir una buena alimentación y evitar tóxicos como el tabaco o el alcohol.
Si tienes algún malestar físico o enfermedad en particular debes consultar con tu médico para saber qué tipo de actividad física puedes realizar. Hay actividades como bailar, nadar, pedalear o hacer ejercicios en el agua que puedes realizar con regularidad y son una buena opción cuando tienes determinadas enfermedades.
4. Ya hago ejercicio el fin de semana, esto es suficiente
Falso. Los adultos deberían hacer 30 minutos de actividad física intensa varias veces por semana. Lo ideal es que si se hace deporte una vez cada 7 días, trates de aumentar la frecuencia y convertirlo en un hábito.
5. Nunca he hecho ejercicio, no podré a hacerlo ahora
Falso. Siempre es buen momento para comenzar a estar activos. Las personas sedentarias pueden iniciar diferentes actividades, empezando por tomar decisiones de la vida cotidiana que te hagan caminar un poco más, realizar tareas que supongan un desplazamiento o bajar una parada antes en el transporte público.
6. Ya tomo medicamentos para el colesterol por lo que no necesito hacer ejercicio
Falso. El colesterol elevado no da síntomas y es un factor de riesgo que puedes prevenir manteniendo una actividad física intensa frecuente. De esta manera, actúas sobre el colesterol y también sobre la presión arterial elevada, obteniendo otros beneficios complementarios.
7. Hacer deporte me costará dinero
Falso. Este clima privilegiado permite que puedas hacer actividad física al aire libre prácticamente todo el año. ¡Aprovecha los parques, cerros o incluso la playa para ejercitarte!