El caso de una expolicía y la muerte de su hija ha estremecido por estos días a Estados Unidos. La mujer dejó a la niña de 3 años al interior de un automóvil caliente mientras mantenía relaciones sexuales con su superior, provocando su muerte.
Bastaron poco más de dos años para que la exfuncionaria, Cassie Baker, se declara culpable de negligencia culposa de homicidio involuntario.
La pequeña Cheyenne Hyer murió asfixiada el 30 de septiembre de 2016 luego de que su madre la dejara sentada en una silla de seguridad durante cuatro horas. Pese a que había dejado el aire acondicionado encendido, cuando Baker regresó, su hija no reaccionaba.
La mujer de 29 años en un principio aseguró que se había quedado dormida, pero finalmente confesó la verdad. Al momento de la muerte mantenía relaciones sexuales con un compañero, siendo ambos desvinculados de la institución.
Cassie Barker pleads guilty to the 2016 death of her daughter. I’ll have the full recap from court live on @WLOX pic.twitter.com/nuN6xX1JbN
— Ray Price (@RayPriceWLOX) 18 de marzo de 2019
El padre de la niña, por su parte, hoy demanda a Departamento de Policía de Long Beach y a Servicios de Protección Infantil de Misisippi, pues durante la investigación salió a la luz de que la expolicía había dejado a su hija sola en el vehículo antes.
“Cada vez que cierro los ojos, me imagino su sufrimiento y luego la imagino acostada en este ataúd”, declaró Ryan Hyer, padre de la niña. «Todavía la veo sonreír y reír en mi cabeza y asumiría que la sonrisa y la risa se convirtieron en dolor y sufrimiento en ese caso
Cassie Baker fue arrestada este lunes tras declararse culpable. Su sentencia será el próximo 1 de abril y la mujer podría enfrentar hasta 20 años de cárcel.