En términos psiquiátricos, los narcisistas tienen unos rasgos específicos, pues requieren admiración, se ven por encima de los demás, son hipersensibles, nada empáticos y buscan que se les agradezca su forma de ser.
Las relaciones con este tipo de personas pueden ser tóxicas y, muchas veces, se ha buscado la forma científica de detectarlos, ya sea para generar distancia o, por el contrario, intentar ayudarlos a mejorar.
Ahora bien, según la última investigación publicada por el «Journal of personality», las cejas podrían revelar si una persona es narcisista o no.
«Aunque inicialmente son encantadores y atrayentes, los narcisistas a menudo se involucran en conductas interpersonales negativas. Identificar y evitar a los narcisistas, por lo tanto, tiene un valor adaptativo”, argumenta el principio del estudio, el cual quiere justificar la razón de esta búsqueda.
Y la conclusión de la investigación es que mantener las cejas distintivamente gruesas y bien arregladas es un rasgo sinónimo de aquellos que “se encuentran en la escala alta del narcisismo, por lo general asertivo y dominante”.
Los encargados de realizar el estudio, Miranda Giacomin y Nicholas Rule, psicólogos de la Universidad de Toronto, realizaron fotografías faciales a todos los participantes, que luego debían completar un formulario específico para personas narcisistas. Estas imágenes se pasaron por una serie de codificadores, que detectaron que las cejas tenían unas características similares, el único rasgo en común entre todos los que participaron.
Los investigadores explicaron que “las personas narcisistas buscan ser estéticamente únicas y reconocibles. Las cejas es lo primero que se detecta al mirar un rostro, por ello, en general las personas así se arreglan meticulosamente esta parte de la cara”.