Una reciente investigación publicada en la revista «Infant behavior & development» concluyó que los niños tienen un tiempo de juego más feliz y saludable cuando tienen menos juguetes.
Los investigadores de la Universidad de Toledo en Ohio examinaron a 36 niños de entre 18 y 30 meses durante 30 minutos en dos salas de juegos diferentes; una con cuatro y la otra con 16 juguetes.
Esto se debe a que pudieron utilizar sus instintos creativos y explorar diferentes formas de divertirse con el mismo elemento, a la vez que estaban más genuinamente interesados en el juego.
«Esto sugiere que los otros juguetes presentes pueden haber creado una fuente de distracción externa, lo que provoca que los participantes abandonaran el juego con un juguete para explorar otro», señalaron los investigadores del estudio.
Por supuesto, la mayor participación con un juguete tiene implicaciones positivas para el desarrollo, como el juego