Un nuevo estudio realizado por el Instituto de Investigación Robinson de la Universidad de Adelaida (Australia), destaca la importancia que tiene la alimentación previa al embarazo, al revelar que las mujeres que consumen mucha comida rápida tardan más en quedar embarazadas que las que llevan una dieta más sana.
El estudio
La investigación, realizada entre el 2004 y el 2011, siguió 5.598 mujeres de Australia, Nueva Zelanda, Irlanda y Reino Unido desde su primera visita prenatal.
Todas eran madres primerizas y no se incluyó a quienes estaban recibiendo tratamiento de fertilidad por causa de la pareja.
En la primera visita al doctor, que se realiza alrededor de las 14 semanas de gestación, las matronas recababan información acerca de la dieta de la mujer y el tiempo que les había tardado quedarse embarazadas.
Así, el estudio cuenta con información de la alimentación durante el mes previo a la concepción con datos sobre el consumo de frutas, verduras, pescado y comida rápida.
Conclusiones
La doctora Jessica Grieger, autora de la investigación, resume la conclusión del análisis de la siguiente manera: «Una dieta de buena calidad que incluya fruta y minimizar el consumo de comida rápida, mejora la fertilidad y reduce el tiempo que se tarda en quedar embarazada».
Según los resultados del estudio, las mujeres que comieron fruta menos de una a tres veces al día, en el mes previo a la concepción, tardaron medio mes más en quedarse embarazadas que aquellas que sí consumieron más de esa cantidad.
Por su parte, las mujeres que consumieron comida rápida más de cuatro veces por semana tardaron un mes más en concebir.