Factores económicos, laborales y sociales serían las principales causas de que los llamados millennials puedan tener una adultez menos feliz que las de sus padres, según lo revela un reciente estudio llevado a cabo en el Reino Unido.
En efecto, una investigación realizada por la organización británica Health Foundation asegura que la generación Y será la primera en ser menos feliz y saludable que la de sus progenitores.
El estudio incluyó encuestas a 2 mil personas entre los 22 y los 26 años, desvelando que la “precariedad e inestabilidad de la vida que los jóvenes afrontan hoy en día tendrá serias consecuencias en su futuro».
“Los jóvenes llegarán a la mitad de sus vidas sin los fundamentos de lo que se necesita para tener una adultez saludable”, añade el reporte.
Dentro de las piezas fundamentales que la investigación afirma que hacen falta en la vida de los millennials, se menciona la dificultad que los jóvenes están teniendo para poder tener una casa propia, ya que el mercado de la finca raíz cada vez parece menos accesible para las generaciones venideras.
Y otro de los factores determinantes es la inestabilidad laboral. Ello, pues más del 50% de los participantes en las encuestas confesaron tener problemas para encontrar trabajos en los que los salarios sean justos y en los que además existan posibilidades de avanzar en sus carreras profesionales.
Jo Bibby, director de la organización a cargo de la investigación, aseguró que los resultados demuestran que los jóvenes no cuentan con el debido apoyo para que tengan una transición sin problemas a su adultez.
“Este apoyo es vital para asegurar que tengan las bases necesarias para un futuro saludable. Sin este apoyo, estamos colocando su futuro y salud en riesgo”, señaló.
