Según un reciente estudio, elaborado por expertos de varios países, el Covid-19 puede dejar hasta 55 secuelas. Y al menos, 5 síntomas persistentes como la fatiga, dolor de cabeza, trastorno de atención, caída del cabello y disnea.
‘Encontramos que un 80% de los pacientes tenía al menos un síntoma hasta diez meses después de haber padecido la enfermedad’, declaró la doctora Talia Wegman-Ostrosky, coautora del estudio.
En la investigación, basada en más de 18 mil publicaciones de análisis médicos, se estimó la prevalencia de 55 efectos a largo plazo en 47.910 pacientes.
Atención urgente a secuelas
Se descubrió así que la fatiga es el síntoma más predominante después de que una persona se recuperó de coronavirus, ya que estuvo presente en el 58% de los casos.
Le siguen el dolor de cabeza con 44%, trastorno de atención con 27%, la caída del cabello con 25 %, y la disnea (ahogo o dificultad para respirar) con 24 %.
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‘Aunque la mayoría son problemas cardíacos, respiratorios o neumológicos, también están las afectaciones psiquiátricas como depresión. Y por eso es importante pensar en la prevención y la atención de estas secuelas’, agregó la doctora Talia.
Además, en el caso de pacientes que estuvieron conectados a respiradores, se reportaron dificultades para tragar o hablar fuerte. Una consecuencia normalmente temporal de las lesiones o la inflamación que provoca el tubo respiratorio que pasa por las cuerdas vocales.
Por su parte, Wegman-Ostrosky considera que es urgente comenzar a implementar un tratamiento post-coronavirus, que abarque diversas áreas de atención debido a estas secuelas.
‘Creo que la principal conclusión aquí es que la atención posterior al Covid-19 es compleja’, aseguró.
Y es que se debe tratar, con la misma importancia, a personas que tienen problemas cognitivos, problemas físicos, problemas pulmonares, problemas cardíacos, problemas renales e incluso traumas.
Otras secuelas detectadas:
- Pulmonares: Tos, malestar en el pecho, apnea de sueño, fibrosis pulmonar y disminución de la capacidad de difusión pulmonar
- Cardiovasculares: Arritmias y miocarditis.
- Neurológicas: Demencia, ansiedad, trastorno de atención, trastornos obsesivo-compulsivos, además de sudoración nocturna.