Una estudiante de 19 años llamada Emma Krenzer decidió crear una pieza de arte para mostrar las huellas del abuso sexual y la violencia que ha vivido.
La joven expresó en el portal BuzzFeed que realizó el proyecto para que ella misma pudiese visualizar «el impacto duradero que una tocación puede tener en un individuo”.
La obra en si es una fotografía en tamaño real donde marcó con los dedos las diferentes agresiones que ha vivido en la que el color morado son las agresiones maternas, el azul: las paternas; el verde son los hermanos; el amarillo los amigos, el naranjo las parejas que ha tenido y finalmente, el más chocante, el rojo que significa «alguien que al que le dijo no».
“Pensé en lo que era verdad para mí, y también, lo que percibí como comúnmente cierto para la gente en general, cuando dibujé esas marcas”, añadió Krenzer.
Krenzer terminó su proyecto la misma noche de la Marcha de las Mujeres en Washington, pero publicó las fotos en Twitter el 23 de enero pasado, donde tuvo más de 300 mil Me gusta y más de 134 mil RT.
https://twitter.com/cheezitfan1/status/823611198734299137
“Creo que la apertura y la vulnerabilidad de la misma permite que otras personas se abran y sean vulnerables también”, afirmó la joven.