Aunque parece una práctica sencilla, muchas mujeres no se encrespan las pestañas de la manera correcta.
Y como consecuencia, éstas se debilitan, se rompen e, incluso, se corre el riesgo de que no vuelven más a crecer.
Revisa estos consejos para que no te ocurra y puedas presumir de unas pestañas largas siempre.
¡5 errores!
-Comprar rizadores de mala calidad
Un mal rizador de pestañas lo más seguro es que se rompa rápidamente o, peor aún, que no cumpla con su función de manera adecuada. Por lo tanto, cuando vayas a comprar un rizador, tómalo como una inversión. Busca calidad para obtener buenos resultados.
-Apretar muy fuerte
Si deseas tener pestañas largas y saludables, asegúrate de que estás aplicando una suave presión al rizar las pestañas. Presionando hacia abajo con fuerza solo darás un ángulo extraño en lugar de una curva que se vea natural.
Además, si aprietas demasiado, puedes romper tus pestañas sin vuelta atrás.
Revisa: Rejuvenece tu rostro con esta mascarilla de cilantro, harina y leche
-No limpiar el rizador
Aunque siempre rices tus pestañas antes de aplicar la máscara, existe la posibilidad de que el delineador de ojos, la sombra, las bacterias y las células muertas de la piel se estén acumulando en tu encrespador. Como consejo, una vez a la semana vierte un poco de alcohol en un algodón y límpialo bien.
-No cambiar las almohadillas
Con el tiempo, las pequeñas almohadillas dentro del rizador de las pestañas se van ensuciando, por lo que es necesario reemplazarlas. Y es que las almohadillas deben estar limpias, ya que su función es de protección.
-Aplicar máscara y después rizar las pestañas
¡Error! Esto no solo provoca que el encrespador se ensucie, sino que también puede dañar seriamente tus pestañas. Al secarse el rímel, las pestañas se ponen más rígidas y menos flexibles. Por lo tanto, rizarlas cuando están en un estado fijo puede llevar a la rotura de las mismas.