Sin duda muchos alguna vez han soñado con pertenecer a la realeza. Sin embargo, ya te hemos contado sobre algunas extrañas reglas que rodean a la monarquía británica y a sus diferentes integrantes. Mientras algunas de estas «reglas» son sólo recomendaciones, otras son prohibiciones que se siguen al pie de la letra.
En este contexto, recientemente se han revelado una serie de palabras que tanto la reina Isabel II como el príncipe Carlos, y sus hijos, no utilizan en su forma de hablar.
Frente a esto, se presume que tanto Meghan Markle como Kate Middleton tuvieron que adaptar su vocabulario a la hora de unirse a la familia real británica, y así seguir el protocolo al pie de la letra.
A continuación, te dejamos algunas de estas palabras:
1.- ¿Pardon? (Perdón)
Aunque en la práctica “pardon” suena bastante más elegante que perdón, la realeza no puede usarla. En lugar de eso, deberían decir “¿disculpa?” o simplemente fingir que han escuchado con una inclinación de la cabeza y sonriendo.
2.- Toilet (baño)
En cambio, usan la palabra “loo” (otro término para referirse a baño), cada vez que algún familiar necesita ir al baño. Al parecer, la realeza británica intenta evitar esta palabra debido a su origen francés.
3.- Perfume (perfume)
Si alguno le quiere decir a otra persona que huele bien, la palabra correcta es “scent” (aroma).
4.- Tea (té)
Quizás esto suena raro, debido a que es conocido lo mucho que los ingleses disfrutan el té. Sin embargo, para acordar un encuentro de este tipo lo más recomendable y educado es invitar a la reina a una cena, es decir. “supper”.
5.- Lounge (salón)
Si bien los palacios tienen muchas habitaciones, todas tienen su propósito, por lo que ninguna debería llamarse simplemente “salón”. En su reemplazo, deben ser nombradas por su razón de existir: “sala de juegos”, “sala de estar”, “comedor”, etc.
6.- Posh (elegante)
Si te consideras una persona elegante, tienes que tener en cuenta que la primera regla de aquello es precisamente no referirse a alguien,o a ti mismo, como elegante.
7.- Dessert (postre)
No hay que esperar postre tras las cenas. Nadie lo llama así. En su lugar, la realeza consume al final de las comidas, un trozo de budín dulce, que en inglés sería “pudding”.