¡Es momento de experimentar un poco más durante el sexo! Porque si pensaste que ya conocías todas las zonas erógenas de tu cuerpo, piénsalo 2 veces. Y es que según revela la revista Glamour hay una serie de terminaciones nerviosas que te pueden ayudar a encontrar el placer durante un buen encuentro sexual.
Porque no hay duda de que has escuchado que la piel es el órgano más grande del cuerpo. Ahora imagina que en la mayoría de nuestra piel tenemos terminales nerviosas listas para producir una reacción de satisfacción. Descubre acá cuales son
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5 zonas erógenas que tal vez no conocías
1. Atrás de las rodillas
Las terminaciones nerviosas de esta parte del cuerpo terminan en la parte posterior, lo que la convierte en un área 100% propensa para divertirte. Pídele a tu pareja que acaricie lentamente esta parte y descubre el poder de esta zona, pero cuidado, no querrá excederse o te causará cosquillas.
2. Pies
Esta parte es calificada más como fetiche que como una zona naturalmente erógena, pero ¿a quién no le gusta un masaje de pies? Imagina esa sensación incrementada al doble con pequeñas mordidas y besos, especialmente si son entre los dedos o en el empeine.
3. Muñecas
Los brazos son una zona excitante por naturaleza, sobre todo en la parte interior del antebrazo. Por eso no es de extrañarse que las muñecas sean el epítome de esta zona, pues concentran una variedad de nervios listos para hacernos estremecer de placer.
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4. Cuero cabelludo
Cuando vamos al salón de belleza, no hay mejor momento que el masaje a la hora de enjuagar nuestro cabello. Sin embargo, a la hora de la acción, este masaje puede volverse un poco más rudo para causar placer. Tu pareja puede pasar sus dedos lentamente por tu cabello para después jalarlo suavemente mientras te besa. ¡Verás que será de lo más excitante!
5. Hombros
El cuello es muy conocido por causar ese estremecimiento tan delicioso del que disfrutamos pero, ¿los hombros? Pues sí, esta extensión de la espalda puede ser todo un mar de sensaciones. Traten con besos sensuales y repetidos justo a lo largo de la clavícula.