Lo lógico sería pensar que el mejor remedio para combatir el estrés en el trabajo es desconectarse del mismo. No obstante, un reciente estudio de la Universidad de Harvard reveló que la solución podría estar dentro de la propia oficina.
La respuesta está en aprender algo nuevo, adoptar una habilidad, recopilar información diferente o enfrentarse a algún reto. Sea como sea, el proceso de aprendizaje puede ser beneficioso para eliminar el estrés.
La explicación radica en que la habilidad o el conocimiento nuevo que adoptes puede ayudarte a resolver los problemas que te causan estrés e, incluso, prevenir situaciones que pudieran ser estresantes en el futuro.
Además, entra en juego el factor psicológico. Y es que aprender algo nuevo mejora nuestra autoestima y nos ayuda a sentir más competentes. Así, nos da un propósito de desarrollo personal y profesional que puede hacernos más resistentes a los factores que causan estrés.
Cómo usar el aprendizaje para combatir el estrés
Desde Harvard Business Review recomiendan seguir tres pasos:
- Cambia la manera en la que percibes las cosas: En vez de abordar las tareas como algo estresante, intenta cambiar la mentalidad y verlas como retos u oportunidades para aprender. En vez de una carga, intenta concebir cada tarea como un paso más en tu desarrollo personal. Literalmente convierte el estrés en aprendizaje.
- Apóyate en los demás: No intentes luchar tú solo contra el estrés. Habla con tus compañeros, preséntalo como un reto que te está costando más de lo normal y pide consejos para abordarlo. Puede que la respuesta sea más sencilla de lo que parece.
- Intenta concebir el aprendizaje como un descanso: Es importante tomarse descansos mentales en los que desconectes por completo del trabajo, pero puedes combinar eso también con descansos de aprendizaje. Elige algo que sea diferente a tus tareas habituales y que te interese, y concibe desarrollar esa habilidad como un descanso y no como una labor más.