Una buena hidratación en el organismo es fundamental para la salud, sobre todo cuando se practica alguna actividad física.
Según un estudio un publicado por la Universidad de Carolina del Norte (EE.UU), una persona que practica ejercicio regularmente necesita mayor hidratación que una que no lo hace. Y especialmente si el entrenamiento implica una exposición al sol.
En lo puntual, la hidratación funciona de la siguiente manera: Por cada 0.5 kg que pierdes durante el ejercicio, tu cuerpo pierde 0.5 litros de agua.
Por lo tanto, esta pérdida debe ser compensada con al menos un litro de agua durante la actividad física. De lo contrario, los niveles de sodio también se reducirán y el rendimiento no será el esperado.
Por cada hora de ejercicio, entonces, se recomienda beber un litro de agua y conforme hagas tu rutina, bebe un par de tragos poco a poco.
Ojo que cuando se toma mucha agua durante la rutina, también mejora el rendimiento.