Un equipo del Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad Tecnológica de Texas desarrolló un estudio para medir el impacto que tendría, si es que lo tuviese, escuchar música animada sobre la tolerancia al ejercicio durante las pruebas de estrés cardíaco.
Como parte del estudio, los investigadores midieron los cambios en la frecuencia cardíaca y la presión arterial, y anotaron cualquier indicación de dolor en el pecho o cambios en el ritmo cardíaco, a medida que los participantes se sometían a un ejercicio físicamente estresante.
Para el estudio se dividió a 127 participantes en dos grupos, todos pacientes por diabetes e hipertensión. Y mientras uno escuchó música animada, el otro grupo se puso audífonos, pero no escuchó nada.
Conclusión: El grupo que escuchó música mejoró al grupo sin música en un promedio de 50.6 segundos. El hecho de poder estar corriendo un minuto extra puede no parecer mucho, pero «después de 6 minutos, sientes que estás corriendo por una montaña, por lo que incluso poder pasar 50 segundos más significa mucho», señaló el autor principal del estudio, Waseem Shami.
La falta de actividad diaria se relaciona con hipertensión, colesterol alto, tabaquismo y obesidad como importantes factores de riesgo de enfermedad cardiovascular.
Por lo mismo, los médicos recomiendan realizar al menos 30 minutos al día de ejercicio moderado, definido como cualquier cosa que eleve su ritmo cardíaco entre un 50% y un 60% por encima de su ritmo de reposo.
«Nuestros hallazgos refuerzan la idea de que la música optimista tiene un efecto sinérgico en términos de que quieras hacer más ejercicio y mantenerte con una rutina diaria de entrenamiento», señaló Shami. «Por tanto, cuando los médicos recomiendan ejercicio , también deberían sugerir escuchar música», concluyó.