El músico británico de 71 años anunció este miércoles, durante una rueda de prensa en Nueva York, que abandonará definitivamente la actividad musical en vivo para dedicarse a tiempo completo a su esposo e hijos.
Eso sí, no sin antes despedirse en grande de los escenarios con una última gira mundial que arrancará en Estados Unidos.
El tour se llamará «Farewell yellow brick road», comenzará en septiembre del 2018 y se extenderá durante tres años, a través de los cuales ofrecerá 300 conciertos por todo el mundo.
«Será la última vez que giraré por el mundo. He tenido una vida y una carrera increíble, he sido absolutamente afortunado. Pero mis prioridades en la vida han cambiado y ahora son mis hijos, mi marido y mi familia. No quiero echarles de menos, ni que me echen de menos a mí», señaló en la rueda de prensa.
El compositor inglés está casado con David Furnish, con quien tiene dos hijos de siete y cuatro años.