Si el objetivo es romper con la monotonía en una relación de pareja, no hay nada mejor que probar nuevas posiciones en la intimidad.
Entre ellas, posturas que pueden realizarse de pie y que, de paso, ofrecen múltiples beneficios.
¿Por qué no atreverse con 'el trípode'?
En qué consiste
Para realizar esta pose, la pareja debe posicionarse cara a cara.
Por un lado, el hombre debe tomar la pierna izquierda de su amante y sostenerla con la mano derecha, por debajo de la rodilla.
La mujer, en tanto, tiene que adelantar sus caderas para facilitar la penetración, mientras que él extenderá un poco su pierna entre las dos de ella para formar un trípode, cuyo equilibrio dependerá de la fuerza y resistencia de ambos.
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Cuáles son sus beneficios
Esta posición, ideal para los más arriesgados, es muy beneficiosa pues permite llegar al orgasmo de una manera más fácil.
Ello, debido a que facilita una penetración profunda en el acto.
Además, el hecho de estar cara a cara les da la posibilidad de mirarse durante el sexo, lo que también aumenta la excitación.
¿Por qué tener sexo de pie?
Más allá de la posición 'el trípode', hay varias otras que podrán probar.
Y es que según los expertos, el sexo de pie provoca una sensación de aventura y emoción que eleva la dopamina, que a la vez genera sentimientos intensos de exaltación.
Asimismo, incrementa la intimidad y la complicidad por el hecho de estar frente a frente.
Y entre otros beneficios, las posturas de pie permiten salir de la cama y practicar el sexo en otros lugares, como la ducha, una pared o apoyados en una puerta.
Lo cierto es que mirarse a la cara siempre desatará más besos y una mejor conexión emocional.
