En la reciente entrega de los Grammy, no faltaron las sorpresas: desde lágrimas en el escenario hasta grandes homenajes. Pero, no sólo se habló de los ganadores, sino también de sus looks.
Por eso todos quedaron sin palabras cuando apareció Sam Smith, con un entallado traje de gala que mostraba su nueva figura más tonificada y con 22 kilos menos. Y todos supieron su gran secreto luego de que le preguntaran en la alfombra roja por su drástica disminución de peso.
Para el cantante, la técnica es la siguiente: «Simplemente he dejado de comer como un cerdo, eso es lo que he estado haciendo». Además, comenzó una rutina de ejercicios que ha realizado constantemente, aunque sin caer en los excesos, porque se está preparando para su presentación de «Writing’s on the wall» en los Oscar.
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