Lo mejor es un abrazo de esa persona especial.
Además de hacernos sentir bien y contenidos, los abrazos y los cariños, tienen un efecto reparador según la ciencia:
Se libera la oxitocina, conocida como la hormona del amor, lo que nos hace más cercanos a los demás y también, ayudan a mejorar a un niño prematuro, funcionan como analgésicos frente al dolor, mejoran el sistema inmune de los enfermos, nos ponen de buen humor y disminuyen la agresividad.