Varios son los artistas y famloso que debido a la pandemia se han tenido que ir adaptando a este nuevo proceso. Y es que la cuarentena no les ha permitido seguir con su trabajo y han tenido que ingeniárselas para no perder sus ingresos. Este es el caso de Miguelo, que tras la crisis por el Coronavirus se reinventó con un nuevo emprendimiento.
En conversación con Las Últimas Noticias, el cantante chileno contó que durante marzo, pasó la cuarentena guitarreando y cantando en la terraza de su departamento. Sin embargo, tras 21 días así, comenzó a buscar otro trabajo.
Según consigna LUN el cantante no se demoró en encontrar qué hacer. «Dije ‘es el momento de dar cariño’ y me lancé con el negocio de las tortas». Además, Miguel contó que son caseras, hechas con amor y las va a dejar él mismo. Incluso sacó permiso para hacer delivery.
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También contó que en las entrega, siempre lleva su guitarra y que en general las personas le piden que cante el cumpleaños feliz o Leyla Leya, lo que hace de forma gratuita. «Necesitamos tanto cariño en estos momentos. El coronavirus es de locos. Te aleja de las personas que más quieres», dijo Miguelo.
¿Por qué Miguelo decidió hacer tortas?
El cantante contó que el 5 de octubre del año pasado inauguró un pub restaurante, con una carta de comida chilena, decoración vintage y cuadros de los personajes históricos de Chile. «Era una pyme que iba con tutti para arriba», contó.
Sin embargo, tras el estallido social, las cosas se empezaron a complicar y pese a que en el verano estaba repuntando nuevamente, el Coronavirus lo complicó aún más. «Pocas semanas antes de tener que cerrar había contratado un chef brasileño. Él me pidió hacer tortas para ofrecerlas a la hora de almuerzo. Las tenía en la vitrina y se vendían súper bien», contó.
Miguelo tiene 7 variedades de torta y trabaja con el chef y una niña que le ayuda a tomar los pedidos. «Nunca imaginé que lo haría. Estoy aprendiendo todos los días algo nuevo», contó.
Sobre cómo le ha ido al negocio, el cantante dijo que «estoy estirando el elástico, salvando. Nunca se va a comprar en ventas con un restaurante, pero me sirve para estar activo física y mentalmente», aseguró.