Esta mañana de miércoles se llevó a cabo la audiencia por el portonazo del que fue víctima el animador Rafael Araneda y su familia, en 2017, en la comuna de Vitacura.
«Es un episodio que no desearía a nadie», partió diciendo el animador, que dio su testimonio cara a cara de los delincuentes.
El animado contó inéditos detalles de su horrible experiencia cuando iba llegando a su hogar, donde fue amenazado con cuchillos y armas de fuego.
En su testimonio reveló que su mayor angustia era lo desprotegido que debían estar sus hijos en ese momento. “Mi mayor temor en ese momento era no tener a la vista a los míos”, explicó.
Sobre lo mismo agregó “lo que se llevaron no tiene ninguna relación a la pérdida de la paz y de la tranquilidad. Los bienes materiales no son nada al lado de eso. Yo no vengo aquí por eso, vengo a aportar información que espero sea importante para el tribunal”.
Luego, prosiguió diciendo: “Yo estoy en este espacio y sólo me muevo de ahí motivado por el grito de mi hija Martina que me dice ‘¡papá me están manoseando, me están toqueteando!’, yo le digo ‘tranquila Martina’ y sigo solicitando que no se le haga daño a los niños”.
“El sistema de seguridad que está en mi casa, les hablaba y les decía ‘va Carabineros, salgan de ahí. Usted señor que tiene un arma de fuego salga de ahí’, y ese hombre, ese delincuente, a mi juicio, se percató de esa situación y después también se ve en las cámaras de seguridad, de observación que yo tengo, que él razona un poco más que el resto y empieza a decirles ‘vamos’, pero eso sucedió un tiempo después”, agregó.
Finalmente, Araneda explicó que los antisociales se fueron en su vehículo y en otros dos, con parte de sus pertenencias personales, como su argolla de matrimonio y sus teléfonos.
“Para mí más que los objetos es la situación de inseguridad, de ser abordado de manera violenta, intempestiva, que ingresan a tu propiedad privada que es tu espacio personal, íntimo y que estás en compañía de quienes más quieres y que no los puedes defender“, finalizó diciendo.