Actualmente existe una gran variedad de cosmética tanto para mujeres adultas como para niñas, y aunque estos nos parezcan tiernos, algunos de ellos esconden en atractivas envolturas, efectos que podrían ser muy dañinos para la salud de los niños.
Muchos menores quieren imitar a sus mamás o hermanas y desde pequeños comienzan a utilizar los productos que tienen en sus casas. Desde sets de sombras, rubores y labiales podrían afectar directamente en la piel de los pequeños.
Al tratarse de un niño, la piel es más delgada, por lo que es mucho más propensa a absorber más fácilmente los químicos que tienen estos productos, los que podrían llegar a irritar la piel.
Por eso el llamado a los padres es a tener mucho cuidado con los componentes de estos productos ya que un informe revelado por el Servicio Nacional del Consumidor, decía que muchos de estos contenían un alto porcentaje de químicos y metales como el plomo.
¿Cómo prevenir?
Revisar el etiquetado antes de comprar, asegurarte que se cumplan los requisitos mínimos que tiene que tener un producto, como límites microbianos y sensibilidad cutánea. Lo mejor es no comprar este tipo de productos en la calle y sí en el comercio establecido, que entrega garantía y seguridad.