Impacto y conmoción provocó la noticia de que la cantante Demi Lovato tuvo que ser internada por una sobredosis de drogas el 24 de julio.
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Ante esto, se especuló que había sido heroína o Narcan, un químico que se utiliza para contrarrestar los efectos de opiáceos. Pero ahora, el sitio especializado TMZ apuntó que la sobredosis de Demi Lovato fue producto de la misma droga que llevó a la muerte a Prince.
Una fuente del medio estadounidense sostuvo que se trató de oxicodona que, al parecer, estaba mezclada con fentanilo. El primero es un analgésico opioide, muy potente y potencialmente adictivo; y el segundo es un poderoso analgésico sintético clasificado por la DEA en la segunda categoría de sustancias controladas, lo que implica que forma parte de los medicamentos potencialmente peligrosos y con alto riesgo de dependencia.
Las investigaciones indican que Demi Lovato se encontraba de fiesta, tras la previa celebración de un cumpleaños. Así la cantante le envió un mensaje a un proveedor con el que había interactuado desde abril, para que acudiera hasta su casa a las cuatro de la mañana. Sin embargo, él era conocido por comprar drogas sucias a traficantes mexicanos, de ahí que la oxicodona estuviese mezclada con el otro componente.
Supuestamente, el contacto de Lovato se retiró de la casa una vez que la vio tirada en la cama y respirando de manera agitada.