Una de las tendencias del momento en cejas es el «microblading», una técnica de micropigmentación que busca corregir o rellenar parte de la ceja faltante para engrosarla. Shannon Bozzell, una mujer de 41 años, decidió someterse a este tratamiento, pero terminó viviendo una pesadilla.
Y es que la estadounidense quería corregir esta parte de su rostro luego de haber abusado de la depilación en sus cejas durante su juventud. Por lo mismo, recurrió a este procedimiento, pero el resultado estuvo lejos de dejarla feliz.
«¡Me arruinó el rostro! Me he estado escondiendo desde entonces. Pasé de no tener nada de cejas (por habérmelas depilado en exceso cuando tenía 20) a tener las cejas más grandes y feas de Kalamazoo. La razón por la que hago esto público es porque la gente debe tener cuidado», advirtió la mujer sobre en sus redes sociales, según consigna el «New York Post».
«Volví al salón para que la artista pudiera ‘raspar’ algo del color y volver a darles forma. Ahí fue cuando mis cejas se infectaron y supuraron mucho (aún tengo cicatrices rosadas muy visibles)», agregó.
Finalmente desde el salón donde la mujer se atendió le ofrecieron nuevamente arreglar la situación, pero Shannon decidió acudir donde otro especialista para que arreglara el mal trabajo. Su historia y sus fotos se hicieron virales.