Desde que tenía 10 años, Keira Walcott comenzó a manifestar los signos del vitiligo en su piel. Ahora, un década más tarde, ocultó su condición a su pololo durante 7 meses, en los cuales se dormía maquillada para no mostrar su real rostro.
A los 14 años esta chica sufrió de bullying por su piel. Sus compañeros la llamaban el parche pirata.
Por su inseguridad, nunca le contó a su novio, Owen Savage, de lo que sufría. Por lo mismo, todas las noches se iba a la cama con una base de maquillaje que ocultaba sus manchas. «Estaba convencida de que no le gustaría el verdadero yo y no le di la oportunidad de ver mi piel desnuda», detalló al diario «Mirror».
Pero, Keira se decidió a mostrar su real apariencia. «Casi no reaccionó, sólo lo aceptó u me dio un abrazo. Me sentía tonta por ser tan paranoica y fue un alivio que él viera la verdad», detalló.
Motivada por todo lo que vivió además creo una línea de maquillaje llamada Kandor Cosmetics, diseñadas para personas con condiciones especiales de su piel, que requieran una cobertura extrema.