No cabe duda que la pandemia dejó a varias empresas de rubros no esenciales muy apaleadas. Esto ha obligado a sus dueños a revindicar sus marcas y apuntar al comercio online u optar a vender productos más esenciales. Esto le sucedió al esposo del fashionista Di Mondo, Eric Javits, diseñador estadounidense que tenía una sombrerería.
El negocio de Javits entró en crisis debido a la pandemia, por lo que el chileno decidió elaborar un plan para ayudar a la empresa de su esposo. «Todas las tiendas no esenciales estaban cerradas y los pedidos fueron cancelados, incluso algunos que estaban destinados para fin de año. En resumen, casi 70 mil unidades en inventario, entre sombreros y carteras, que no se venderían. En algún momento se pensó en cerrar la empresa», reveló Di Mondo a LUN.
Di Mondo al rescate
El fashionista por eso empezó a ayudar en el negocio de Javits y propuso otras estrategias de venta. Como potenciar la venta online.
«La primera publicidad que hicimos fue a principios de mayo durante diez días. Gastamos 400 dólares y eso generó 47 mil dólares en ventas. Quizás no era mucho para lo que vendía la empresa, pero la proporción era enorme», detalló Di Mondo.
Sin embargo, el ser jefe de operaciones no fue fácil, ya que muchos trabajadores de la empresa de su esposo se resistieron a sus medidas. Aún así, lograron llevarlas a cabo.
El socialité confesó que es la primera vez que hace trabajo de oficina. «Literalmente trabajamos como perros con Eric y todo el equipo. Por casi dos meses llegábamos a las 6:30 AM a la oficina y nos quedábamos hasta la noche, pero no me importa porque me encanta el rol empresarial», contó.
Ante los nuevos desafíos que se le presentaron este año, Di Mondo hace una reflexión.
«A lo largo de mi vida he aprendido muchas cosas que me han ayudado a enfrentar este desafío. Uno no puede congelarse ante un problema, por el contrario lo tienes que absorber, analizar y reaccionar. Readaptarse es clave en un mundo normal, pero en pandemia ha sido crucial. Te adaptas o te mueres», concluyó.