«Entrenar como un hombre no te convertirá en uno. Al revés, levantar peso potencia las curvas naturales del cuerpo y te hace más femenina», señala Marcos Vázquez, fundador del popular blog europeo Fitness Revolucionario.
Y es que según este entrenador, pocas mujeres logran sus objetivos siguiendo las recomendaciones habituales, «porque no están diseñadas para ser efectivas, sino para ser rentables».
Y no es el único que sostiene esta teoría. El gurú sobre la ciencia del deporte y el acondicionamiento físico, Brando Hasick, es otro de los propulsores del entrenamiento de fuerza en las mujeres, asegurando que el planteamiento de ejercicios livianos, largas horas de cardio y muchas repeticiones con poco peso tiene que cambiar.
«Las mujeres piensan que deben entrenar diferente a los hombres para conseguir resultados en su cuerpo, pero están muy equivocadas. Aunque utilicen los mismos ejercicios y cargas elevadas, la manera en que el cuerpo femenino responde a la testosterona hace imposible que éste se desarrolle de la misma manera que el del sexo masculino», explica el entrenador.
Siguiendo a estos expertos, los beneficios para las mujeres del entrenamiento de fuerza son los siguientes:
- Mejora la composición corporal. El éxito de las fotografías del antes y el después reside en un cambio de composición corporal, ya que no importa tanto el peso sino los cambios visibles en el cuerpo. Es decir, menos volumen y alguna talla menos. Y llegará un momento en que para conseguirlo será imprescindible entrenar con cargas.
- Previene la osteoporosis. La salud de los huesos es más frágil en las mujeres, quienes deben prestarle aún más atención con la llegada de la menopausia. Por eso, una manera eficaz de combatir problemas óseos es mediante el entrenamiento de la fuerza.
- Reduce el estrés. Son muchos los estudios que relacionan este tipo de entrenamiento con la disminución de los síntomas de ansiedad, depresión y nerviosismo.
- Ayuda a quemar más calorías. Al fortalecer y desarrollar la musculatura, el cuerpo quemará más calorías aun estando en reposo. De esta forma, también se podrán aumentar las calorías de la dieta.
- Se estiliza la postura corporal. Al no ejercitarse los músculos, algunos pierden tono estropeando la postura. Sin embargo, al trabajarlos mediante un entrenamiento de fuerza, recuperan su forma, consiguiendo incluso un buen efecto estético.