¿Alguna vez te has preguntado la misión completa, que tienen los perros en nuestra vida? No solo son buenos para acompañarte y cuidar la casa ¡Te vas a sorprender con su misión!
Son terapeutas emocionales; no dudarán en darte un buen lengüetazo en la cara si te sienten triste. Su misión puede ser individual o colectiva; muchos de ellos hacen una labor muy particular o pueden impactar a todo un grupo de personas y/o familias.
Protectores Energéticos
Nuestros ángeles de 4 patitas, absorberán de ti y de tus espacios vibraciones en desbalance; ellos después se «limpiarán» con la ayuda del agua, plantas y otros elementales que los auxilian.
Ellos saben su misión y no dudarán hacerlo; ciertas muertes repentinas sin razón aparente a veces son provocadas por esas energías fuertes que absorben de ti o de tus espacios.
Una buena manera de ayudarlos a purgar la energía que han absorbido, es darles mucho afecto físico; las caricias los alegra; al alegrarse se amplía su campo áurico y ese elevado estado de ánimo sacudirá esa energía en desbalance rápidamente, como si fuera un gran repelente energético. Las Terapias holísticas como el Reiki; les ayudan muchísimo a balancear sus chakras.
Ellos te eligen a ti
Ellos te eligen a ti –no tú a ellos– y saben muy bien tu misión; la suya es acompañarte en esa misión hasta el final. Llegarán a ti de la manera menos esperada; e incluso cuando tienes la oportunidad de “elegir” entre muchos otros perros; él o ella tendrá un acercamiento, mirada y simpatía particular que te permitirá no tener duda de la elección; sabrás que has elegido bien (según tu), sin embargo él o ella fue quién te eligió y con su energía y vibración te lo hizo saber.
Son Maestros del Amor incondicional
Son fieles; nos enseñan diariamente el amor incondicional y humildad. Nunca olvidan saludarte o moverte la cola alegremente cuando te vuelven a ver aunque hayan pasado 5 minutos, son los gurús de la Nobleza.
La misión del “ángel canino” es a veces tan especial, sobre todo en casos donde el vínculo de amor es tan extremo que ante la muerte o pérdida del dueño(a) ellos pueden “dejarse morir” así mismos para terminar su misión; pues ya no encuentran el sentido de su vida.
En muchas ocasiones; en donde el vínculo es muy fuerte entre el “ángel canino” y el humano, existe la posibilidad de que se acompañen en distintas vidas. Incluso como el promedio de vida de un perro es menor a la del humano; existe la posibilidad de que en la misma encarnación el perro logre llegar al mismo dueño en diversas ocasiones en diferentes cuerpos físicos. Sobre todo cuando la conciencia del perro es muy elevada; el perro(a) aprende el camino espiritual de regreso fácilmente y se las ingeniará para regresar a ti..
Son expertos radares energéticos; siempre están alerta a pesar de que los observes descansando; su sensibilidad auditiva es impresionante y que podemos decir del olfato y la visión; ésta última les permite ver otras dimensiones y planos de conciencia que nosotros difícilmente percibimos; es por eso que estarán inquietos, ansiosos y/o se pondrán a ladrar constantemente ante una presencia fuerte que consideren negativa no solo a nivel físico si no a nivel energético.
Terapeutas Emocionales
A nivel individual; estarán siempre pendientes de su dueño y/o la familia que lo haya “adoptado”; velará por la salud emocional siempre procurando armonía en el entorno; cuando encuentre tristeza, desamor, depresión y este tipo de emociones; buscará la manera de sacarte de ese estado; a veces el famoso “lengüetazo en la cara” es la mejor terapia.
El Movimiento de la cola genera ondas vibracionales que armonizan el ambiente; envían señales de amor; una vibración universalmente conocida y muy necesaria.
Es por esa razón que nuestros amigos de 4 patitas son excelentes terapeutas a nivel colectivo; son usados en terapias grupales para levantar el ánimo de enfermos, sobre todo en niños que están pasando un mal momento. Los hospitales cuentan con terapias emocionales que usan perros para este propósito; es allí donde nuestros amigos de 4 patitas emanan vibraciones altas para elevar los campos energéticos -auras- de los pacientes; tan sencillo como mover la cola y hacer sonreír a un desconocido ayuda a levantar su frecuencia vibracional; muy importante para la recuperación o estabilidad del paciente.
Son mejores amigos y compañeros; son motivadores y juguetones.
Fuente: ParadigmaTerrestre.com