Los ingredientes naturales, como la papa y la miel, se convierten en una excelente opción para atenuar las manchas del rostro de un modo sencillo, económico y efectivo a través de una mascarilla.
La papa, por un lado, es un tubérculo rico en vitaminas, nutrientes y minerales, que arrastran las células muertas y favorecen la regeneración de la piel, lo que permite atenuar las manchas y marcas de acné. Asimismo, tiene el poder de potenciar la luminosidad de la tez, homogeneizar el tono del cutis y retrasar la aparición de arrugas.
La miel, tan tanto, limpia la piel y elimina la suciedad acumulada en el cutis de un modo natural, a la vez que acabar con los granos y los puntos negros, al tratarse de un ingrediente rico en propiedades antisépticas y antibacterianas.
Ingredientes para la mascarilla
- Una papa
- Una cucharada de miel de flores
Preparación
-Retira la piel de la papa y lávala para eliminar restos de tierra y suciedad.
-Ralla el tubérculo y viértelo en el interior de un bol, agregando en seguida la miel de flores.
-Mezcla los dos ingredientes empleando una cuchara hasta que se hayan transformado en una pasta homogénea.
-Extiende la mascarilla casera obtenida sobre el rostro limpio y seco, y deja que actúe durante 15 minutos.
-Transcurrido ese tiempo, retira el producto con abundante agua tibia, seca con una toalla suave y aplica tu crema hidratante de uso habitual.
-Pon en práctica este remedio tres o cuatro veces por semana, idealmente en la noche, hasta que las marcas hayan desaparecido.