Demi Lovato ha transitado un largo camino para superar sus trastornos alimenticios y adicciones a las drogas y el alcohol. No obstante, hoy la cantante de 28 años parece estar realmente mejor que nunca.
Y es que hoy la intérprete de «Cool for the summer» exuda confianza y amor propio en sus redes sociales. Llegar a este punto de su vida no fue fácil, por lo mismo, la artista quiso reflexionar en Instagram sobre este proceso y lo cómoda que hoy se siente con su cuerpo.
«Solía creer sinceramente que la recuperación de un trastorno alimentario no era real. Que todo el mundo estaba fingiendo o recayendo en secreto a puerta cerrada. Seguramente vomita aquí y allá, posiblemente no puede aceptar su celulitis», partió escribiendo la cantante en un extenso mensaje.
«Esas son solo algunas de las cosas que solía decirme a mí misma mientras crecía. Estoy muy agradecida de poder decir honestamente por primera vez en mi vida: mi dietista me miró y dijo: ‘Así es como se ve la recuperación del trastorno alimentario’«, agregó Demi.
El homenaje de Demi Lovato a sus estrías
En ese contexto, la exchica Disney quiso llevar su mensaje de autoaceptación mucho más allá y celebrar una parte de su cuerpo que antes solía odiar: sus estrías.
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«En honor a mi gratitud por el lugar en el que me encuentro hoy, esta fue una pequeña sesión que hice yo sola en cuarentena este verano cuando quería celebrar mis estrías en lugar de avergonzarme de ellas», señaló la artista, quien compartió una serie de fotos de las marcas de su cuerpo resaltadas con glitter.
«Empecé a usar pintura con purpurina real en mis estrías para celebrar mi cuerpo y todas sus características (ya sea que la sociedad las considere buenas o malas). Mis estrías no desaparecen, por lo que también podría arrojarles un poco de brillo sobre ellas, ¿verdad?», planteó.
Finalmente Demi señaló que esperaba que sus palabras sirvieran como «un recordatorio para cualquiera que crea que no es posible: ‘Realmente puedes hacerlo. Cree en ti. Este año fue difícil… sé amable contigo mismo si te equivocas y recuerda volver a encarrilarte porque vale la pena el milagro de la recuperación. Te amo».
