Este pasado sábado se emitió un nuevo capítulo de «La divina comida» de CHV, donde los cuatro invitados fueron la comediante Bernardita Ruffinelli, el escritor y candidato a constituyente Jorge Baradit, el actor Alexis Zisis y la actriz y cantante Daniela Lhorente. Entre ellos tuvieron que competir por ser el mejor anfitrión de la edición.
Un momento que llamó la atención de los televidentes fue cuando la actriz Daniela Lhorente decidió mostrar su casa, cuando le tocó ser anfitriona.
La actriz habló de la calidez de los espacios y que su decoración es más bien ‘campestre-chilena’, donde también había una gran cantidad de amuleto y objetos energéticos.
También la intérprete mostró su espacio personal favorito. Ahí es donde hace sus clases de biomagnetismo, lee sobre ello y estudia otras disciplinas relacionadas a la medicina energética.
El biomagnetismo es una terapia a través de imanes de alta potencia, colocados en diversas zonas del cuerpo, que ayudan a eliminar bacteria, virus y otros parásitos que causan enfermedades.
«Desde la pandemia empecé a sentir que necesitaba calmar harto mi mente y se dio la instancia de crear este espacio. He tomado cursos de biogmagnetismo, armé mi altarcito y tengo muchos libros de energía, medicina energética, que son las cosas que a mí me gustan. Aquí medito, prendo mi vela y esto me dio fortaleza y nada po’, tengo que ser yo no más», contó en «La divina comida».
La casa fue construida por otro comensal del mismo episodio
A muchos televidentes también les sorprendió cuando se contó en el programa que el primer propietario y quien construyó la casa fue Alex Zisis, el compañero de programa de Daniela.
El actor vivió por 14 años ahí y en una de las veladas entró nuevamente al lugar, lo que sin duda lo emocionó. Incluso, se dio un momento chistoso, cuando vio el comedor y expresó: «¡Pusieron la mesa al revés! No va así, aunque tiene que ser una mesa cuadrada». Aludiendo a cómo la tenía probablemente antes.
También, Zisis dio algunos datos de la casa. «Las puertas y las ventanas son de ciprés de las Guaitecas (comuna de Aysén), recogidas en el desierto… eran de los telégrafos del norte«, contó.
Finalmente, el actor señaló que la casa la tienen muy bonita, y destacó que le pusieron piscina al lugar, algo que él nunca se atrevió a hacer, por sus niños pequeños en esa época.
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