La empresa Ermont, un dispensario de marihuana medicinal ubicado en Massachusetts, incluyó en su menú nada menos que una pizza con este ingrediente.
Se trata de una pizza de queso con salsa de tomate, de unos 15 centímetros, que contiene 125 miligramos de tetrahidrocannabinol (THC), que es el principal complejo psicoactivo de la cannabis.
Esta iniciativa ha sido creada especialmente para aquellos usuarios de esta planta que no quieren fumarla o comerla en otras presentaciones, por ejemplo en postres.
Eso sí, sólo puede ser adquirida por aquellas personas que tienen la identificación estatal que los autoriza a hacer uso de la marihuana con algún fin medicinal.
Hace tres semanas que salió a la venta y ya ha sido todo un éxito, según reporta la compañía estadounidense.
La pizza cuesta 38 dólares ($25.000 aproximadamente) y también aparece como una alternativa para aquellos pacientes con restricciones que no pueden consumir tanta azúcar.
Cabe mencionar que este dispensario incluye en su catálogo diversos productos comestibles elaborados con marihuana, tales como dulces, galletas, aceite de oliva y muffins, entre otros.