El huevo y el aceite de oliva son ricos en ácidos grasos esenciales que hidratan la piel en profundidad, previenen la descamación y aceleran la desaparición de las quemaduras solares.
Por lo tanto, si deseas calmar una quemadura de este tipo, no dejes de probar el siguiente tratamiento casero.
Ingredientes
La clara de un huevo
Una cucharada de aceite de oliva virgen
Un disco de algodón
Preparación:
- Mezcla la clara del huevo con el aceite de oliva usando una cuchara.
- Cuando los dos ingredientes se hayan transformado en una pasta homogénea, colócalos sobre las zonas de tu piel en las que hayan quemaduras del sol.
- Puedes llevar a cabo esta operación usando un disco de algodón o los propios dedos.
- Al finalizar, no será necesario que aclares el producto con agua, ya que cuanto más tiempo haga efecto sobre la piel, más efectivo resultará y antes eliminará la quemadura solar.
- Pon en práctica este truco hasta que las quemaduras hayan desaparecido.