La naranja es rica en vitamina C, una sustancia que elimina las impurezas de la piel y le aporta una dosis extra de luminosidad.
La miel, por su parte, es perfecta para nutrir las manos resecas, pues contiene azúcares que arrastran las células muertas, sumándole juventud.
Por lo tanto, si buscas un tratamiento para acabar con las manos secas este invierno, prueba el siguiente truco a base de naranja y miel.
Ideal, por lo demás, en tiempos en que el lavado de manos debe ser frecuente.
Ingredientes
- Una naranja
- Una cucharada de miel de flores
Preparación
- Lava la naranja y exprímela para extraer su jugo.
- Mezcla en un cuenco el jugo de la naranja y la miel.
- Aplica la solución resultante sobre las manos secas con un suave masaje circular.
- Deja que actúe durante unos 10 minutos.
- Para finalizar, retira la mezcla con agua templada y dile adiós a la sequedad de las manos.
- Puedes recurrir a este truco una o dos veces a la semana.