El aceite de argán, también conocido como el “oro de Marruecos”, es un pequeño tesoro de la naturaleza plagado de beneficios para la piel y el cabello.
Sin embargo, su poder antibacteriano lo convierte en el ingrediente perfecto para combatir el acné de una forma natural, y acabar con los antiestéticos y molestos granitos.
Todo ello, complementado con el jugo de limón, que contiene agentes limpiadores que mantienen la piel limpia y suave.
Ingredientes
-Una o dos cucharadas de aceite de argán puro.
-Medio limón.
Preparación:
- Vierte el aceite de argán en el interior de un recipiente limpio.
- Exprime el limón para extraer el jugo que guarda en su interior y colócalo dentro del mismo cuenco en el que has introducido el aceite.
- Remueve los dos ingredientes con la ayuda de una cuchara para mezclarlos y extiende el producto resultante sobre el rostro limpio, realizando un suave masaje ascendente.
- Deja que esta mascarilla haga efecto durante unos 15 minutos.
- Transcurrido ese tiempo, aclárala con abundante agua tibia, seca la piel y extiende una crema hidratante acorde a tu tipo de cutis.
- Pon en práctica este truco casero 2 o 3 veces a la semana para obtener mejores resultados y eliminar los granos en poco tiempo.