Mientras la obesidad es considerada un grave problema de salud y muchos luchan por bajar de peso, en Estados Unidos existe una mujer de 27 años que sueña con convertirse en la más gorda del mundo y diariamente ingiere grandes cantidades de alimentos altos en grasa para cumplir su objetivo.
Su nombre es Monica Riley y según sus palabras este cometido es parte de una fantasía sexual que tiene junto a su pareja. Incluso es él quien la ayuda en este enfermizo objetivo, preparándole batidos altos en calorías y alimentándola a través de un embudo. Sí, no es broma.
La mujer, que es modelo de talla XXL, actualmente pesa 317 kilos, pero su meta es llegar a los 454 kilos y quedar postrada en cama. Para esto, según The New York Post, la joven se alimenta a diario de seis galletas, seis salchichas con pan, un gran plato de cereal azucarado, dos batidos para el aumento de peso, cuatro sándwiches McChicken, cuatro hamburguesas dobles con queso, papas fritas grandes, 30 nuggets de pollo, macarrones con queso, tacos y un balde de helado.
Su familia, por su puesto, no está de acuerdo, pero a ella poco le importa. “Me sentiría como una reina (…) a él le excita la idea. Es una fantasía sexual para ambos, ya lo hemos conversado bastante”, reveló al canal de Youtube Barcroft TV y agregó que “mientras más gruesa me pongo, más sexy me siento”.